La comediante Nikki Glaser se convirtió en el foco de atención durante los Golden Globes 2025 debido a sus comentarios sobre Dios y su actuación, que muchos consideraron provocativa.
Durante la ceremonia, Glaser hizo referencia a Dios con «cero votantes», lo que provocó reacciones desfavorables entre los asistentes y en las redes sociales. En su discurso, insinuó que «los discursos de aceptación han estado en llamas» y afirmó que «no hay sorpresa en esta ciudad sin Dios».
Además, su actuación musical, en la que se vistió con prendas que imitaban las del Papa y presentó una versión alterada de la canción «Popular» de Wicked, también generó críticas. Los espectadores religiosos la acusaron de ridiculizar a Dios y de ser responsable de desastres naturales, como los incendios en Los Ángeles.
Tras los incendios en Pacific Palisades, muchos usuarios en redes sociales comenzaron a difundir teorías conspirativas, acusando a Glaser de haber provocado la catástrofe con sus comentarios. Ante la avalancha de críticas, la comediante se vio obligada a desactivar los comentarios en su cuenta de Instagram.
La controversia ha suscitado opiniones encontradas: algunos argumentaron que «no se debe burlar de Dios» y que «cada uno cosecha lo que siembra», mientras que otros defendieron a Glaser, sugiriendo que su guion fue elaborado en colaboración con la producción de los Golden Globes y que no fue un discurso espontáneo.
La actuación de Nikki Glaser ha abierto un debate importante sobre los límites del humor y el respeto hacia las creencias religiosas, reflejando la polarización de opiniones en la sociedad actual.