Los esfuerzos de recuperación para las compañías de combustible en Port Everglades continúan en la medida que pasan los días luego de la tormenta.
La escasez de gasolina se ha hecho más evidente en el sur de la Florida tras la tormenta con récord de lluvia sobre Fort Lauderdale y otras comunidades aledañas, lo cual ha limitado la distribución de los hidrocarburos que llegan por el puerto. Mientras tanto, los precios se disparan en las bombas de cara al consumidor.
La afectación mayor con el abasto de gasolina ha sido para los condados de Miami-Dade y Broward. Frente al Puerto Everglades hay varios barcos cisterna y otros en camino, que esperan en alta mar para descargar el combustible en cuanto las condiciones en el puerto lo permitan.
El sur de Florida es una zona conocida por su topografía plana y su proximidad al nivel del mar. Gran parte de la región está situada a menos de un metro sobre la superficie marítima, lo que hace que sea particularmente vulnerable a las inundaciones en caso de fuertes lluvias o marejadas.