Hay médicos que curan con medicamentos y cirugías, pero hay otros que también sanan con amor, creatividad y esperanza. Ese es el caso del Dr. Leandro Guimarães, un pediatra y cirujano brasileño que se ha ganado el corazón del mundo con una dinámica única antes de cada intervención: vestir a sus pequeños pacientes como superhéroes y hacer junto a ellos una entrada triunfal al quirófano, digna de una película de Marvel o DC.
Este gesto, más allá de ser un acto simbólico, ha transformado el ambiente hospitalario en un espacio menos temido y más lleno de magia para los niños que enfrentan procedimientos quirúrgicos. Spiderman, la Mujer Maravilla, Batman, Elsa o Iron Man son solo algunos de los trajes que han acompañado a los pequeños guerreros rumbo a sus cirugías, siempre guiados por un médico que cree firmemente que la salud emocional también forma parte del tratamiento.
La iniciativa ha generado un impacto tan positivo, que este 2025 el Dr. Guimarães fue reconocido internacionalmente con el WEmbrace Award, en la categoría de Historias Inspiradoras. Este prestigioso galardón celebra a quienes, desde distintas partes del mundo, están haciendo una diferencia real en sus comunidades a través de acciones transformadoras y humanas.
Para el doctor, esta dinámica es mucho más que un espectáculo: es una herramienta de empatía y conexión que ayuda a reducir el miedo, la ansiedad y el dolor de sus pacientes. “Ellos ya son héroes desde que pisan el hospital, solo les damos la capa para que lo recuerden”, ha dicho en más de una ocasión.
El ejemplo del Dr. Leandro Guimarães nos recuerda que el verdadero poder no siempre viene de los superpoderes, sino de la sensibilidad, la vocación y la voluntad de hacer las cosas con el corazón. Hoy, su historia no solo inspira al mundo médico, sino también a todos los que creemos en la fuerza de los pequeños actos de amor.
